Campaña contradictoria de la Procuraduría

Procurador Francisco Domínguez Brito (centro).

A su derecha Rossana Reyes, procuradora adjunta de la Mujer, a su

izquierda, Magali Febles, organizadora Miss RD. Foto Guillermo García.

Ayer una colega comentada en su muro de Facebook sus reparos ante un convocatoria de cobertura de prensa que combinaba dos extremos algo distantes: al Procurador General de la República y la organización Miss República Dominicana.

La mala premonición se acentuaba, señalaba la colega, ante el tema que servía de lazo a estos dos extremos: lucha contra la violencia hacia la mujer.

Expresados los miedos, decidimos esperar el resultado de esa convocatoria. Hoy los hechos dieron la razón a nuestros temores.

Resulta que la Procuraduría y los organizadores del concurso de belleza se han unido para que este año el certamen este "basado en una novedosa campaña dirigida a contribuir a la erradicación de la violencia hacia la mujer". ¿Cómo?

"...el procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito, manifestó que resulta de gran relevancia el hecho de que el mensaje a la mujer víctima de violencia, como al hombre agresor y a los entornos de las víctimas, llegue en todo el territorio nacional a través de la labor que realizarán las candidatas del concurso, para lo cual la Procuraduría General les facilitará todas las herramientas técnicas y el soporte y asesoría de los especialistas en la materia, de forma tal que las acciones de prevención vayan dirigidas en el lenguaje que ameritan los casos y con los lineamientos especiales que se requieren para cada uno de los actores que inciden en acrecentar y mantener el círculo de violencia que padecen las víctimas", reseña un nota publicada en un portal noticioso.

Un concurso de belleza es una de las expresiones machistas mediáticas por excelencia. Un espacio que convierte a la mujer en "una cosa" que vale por un cuerpo definido desde cánones de "belleza corporal" distorsionados, manipulados por procesos de cirugías plásticas. Un espacio que "juzga" un montaje superficial, vacío, teatral que violenta, VIOLENTA, a la mujer.

Es imposible conciliar ese espectáculo de cosificación con la intención de prevenir el maltrato a las mujeres. Es como tratar de mezclar aceite y agua.

Esto evidencia que no existe el mínimo criterio en la cacareada lucha contra la violencia a la mujer, que el año pasado dejó 74 víctimas según estadísticas oficiales. Una "lucha" que deja sin atender a una mujer embarazada de ocho meses y golpeada por su esposo en una de las fiscalías de Santo Domingo Este, una mujer que fue llevada al hospital, con su bebé muerto en el vientre, por una amiga y colega impotente ante la situación de verla sentada por horas sin recibir ayuda frente a las autoridades que están en el deber de hacerlo.

Una "lucha" que al parecer es más efectiva en las relaciones públicas de las autoridades, que ahora mezclan la contradicción evidente entre un expresión machista y reduccionista de la mujer y la lucha contra una violencia alimentada por ese misma expresión de cosificación.

Lamentable.

 El procurador Domínguez Brito tomándose una autofoto con los organizadores del Miss República Dominicana Universo. Foto Guillermo García