miércoles, 22 de abril de 2015

La renuncia de la FNP


La renuncia a sus cargos en el gobierno de los cuatro miembros de la Fuerza Nacional Progresista (FNP), incluyendo la de su fundador y presidente Marino Vinicio Castillo (reconocido por sus formas nada santas de influir en la política desde la dictadura) pone en una perspectiva distinta la división creada en el partido de gobierno por la decisión de reelegirse del presidente Danilo Medina.

El FNP dice que lo hace porque la Constitución está en peligro. Pocos conocían su amor constitucionalista, aunque después de amagar tanto con la renuncia y el rompimiento con el gobierno desde que Medina iniciará el Plan de Regularización, dando la posibilidad a los afectados por la sentencia 163-13 de normalizar su situación migratoria en República Dominicana, no solo cumplen la amenaza, sino que dejan clara sus intensiones.

Para algunos esto es coherencia, pero un periodista que ejercía años antes de que yo naciera me hizo el siguiente apunte:

"Vincho acompañó a Joaquín Balaguer en el plan que buscaba desconocer la voluntad popular en 1978 (en ese año ganó el Partido Revolucionario Dominicano la presidencia, con Antonio Guzmán, luego de 12 años de gobierno balaguerista), y pese a la presión nacional e internacional, le quitaron tres senadurías al PRD. Además, fue promotor de la reelección de Joaquín Balaguer en varios períodos y la de Leonel Fernández en el 2008".


Marino Vinicio (Vincho) Castillo y su FNP han sido siempre aliados al expresidente Leonel Fernández, presidente del partido de gobierno (PLD) y ahora antagonista por la candidatura presidencial peledeísta frente a mandatario.

Si la lógica no falla, Castillo y su partido van ahora a sumar fila con Fernández y su estrategia para impedir que salga adelante el proyecto de ley que convoque la Asamblea Nacional para reformar la Constitución.

Y hay que recordar que los juegos políticos del FNP, expertos en campaña sucia, son bastantes pesados.

Aquí el comunicado informando la renuncia.




Mientras, la alegría de muchos (incluyéndome) por la renuncia del FNP al gobierno no se ha hecho esperar en las redes sociales.

Aquí les comparto algunas reacciones en Twitter


domingo, 5 de abril de 2015

Día del periodista: No todo está perdido

A principios de marzo pasado un "periodista", lo pongo entre comillas porque hasta donde averigüé de periodista tiene lo que tiene de físico nuclear, reclamó  a forma de denuncia que la Policía Nacional le pagará a un grupo de periodistas y a otros no. Así, sin más ni menos.

Ese caballero, quien hizo su "denuncia" (las comillas por la misma razón de la anterior) es, de acuerdo con lo que algunos amigos me contaron, un reclamador de favores consumado, y que suele usar su ejercicio de periodista para obtener beneficios de todo tipo.

El asunto provocó quejas en algunas personas en las redes sociales. Por supuesto, la queja se hizo desde la generalidad y fueron los periodistas "endiosados de la televisión" (las comillas son mías) quienes con más ahinco hacían sus juicios absolutos de que "todos los periodistas están corrompidos". Irónico si partimos de que ellos son también periodistas.

El comentario en Facebook de una de esas "estrellas", especialista "opinologa" de un matutino en televisión, que no hace otra cosa que hablar a partir de los periódicos y páginas webs informativas con esos análisis cortoplacitas que no pasan del dos más dos son cuatro, fue el que rebozo mi paciencia.

Después de ponerle algunos puntos sobre las íes en su muro, que por supuesto no se tomo la molestía de contestar, amplíe los argumentos que le señalé en mi muro de Facebook. Hoy, día del periodista, lo comparto, y lo hago porque dentro de todo lo malo que existe en este ejercicio en República Dominicana, de la censura y la autocensura, de los intereses, y de los muchos que se han valido de esta carrera para hacerse millonarios (que por cierto no son periodistas ya), hay y existen periodistas que si lo son, que pelean ante todo esto y que no dejan que todo termine convertido en puras sobras.

Porque no todo está perdido.

Extracto cartel II Jornada Medios de Comunicación Periodismo y Empresa. Tomado de aquí 


Voy a decir algunas cosas sobre el tema de los periodistas, el periodismo y los "seudoperiodistas".

Así como la gente le encanta generalizar, voy ahora a hacer unas puntualizaciones porque me da la gana, porque me enoja que hablen de que "el periodismo está totalmente corrompido" y hablan de manera absoluta sobre los periodistas cuando sale a relucir un busca vida enganchado a periodista, y periodistas también sin ningún criterio ético haciendo gala de su influencias, de sus "búsquedas" y de su "chapeo".

Les informo, señoras y señores, que hay periodistas que cuando usted duerme a las cinco de la mañana están trabajando, redactando memorias de un segundo o tercer trabajo, corrigiendo textos y exámenes porque dan clases, camino a otro trabajo o labor. No leyendo los periódicos en programas de televisión y radio para opinar ("la opinología"), con anuncios de las instituciones del Estado que dejan de criticar para que no le quiten la publicidad.

Les informo, señoras y señores, que un colega amigo se mantuvo por más de un año sin cobrar en Telecentro, y que para seguir ejerciendo decidió usar su carro, un modelo con 10 años de atraso, para conchar en la mañana y ir a trabajar como periodista en la tarde, con tres hijas que mantener y una esposa enferma. Y ese periodista hoy en día tiene dos trabajos y cría a sus hijas sin su esposa, quien murió. No como algunos periodistas "muy serios" que cobran asesorías de ONG's y lo ocultan, y de paso y peor, convierten en agenda los temas de esas ONG's.

Les informo, señora y señores, que muchos periodistas han sido cancelados por no prestarse a marullas de directores y editores de sus medios, que han decidido no firmar notas chapuseras, o notas a quien un director le ha incluido un párrafo porque "hay que interpretar", periodistas que defiende lo único que tienen, su dignidad y credibilidad.

Sí, señoras y señores, hay periodistas con dignidad, hay periodistas que rechazan esas prácticas, que rechazan dinero, que son lo suficientemente probados para revelar los conflictos inevitables por motivos laborales. ¡Sí, los hay, carajo!

Y podría decir mucho más, de muchos periodistas. Y sí, es una decisión serlo. Y me pregunto si aquellos que se montan en un altar a generalizar y a creerse "lo mejor de lo mejor" pretenden que el periodismo quede en manos de los peores, porque al parecer es lo que quieren para justificar sus desvaneos de "moralina" que ve la paja en el otro pero no el tronco que le atraviesa la cabeza de un lado a otro, porque esos son los que con más fe generalizan y meten a todo el mundo en el mismo saco.

Y lo más bonito es que para esos los únicos corruptos son los periodistas, no mencionan a sus jefes, ni a los directores, no a los editores. Los únicos son los reporteros de a pies. Y cuidado, mucho cuidado, no busco justificar a nadie, cada quien tiene el peso de sus hechos, pero no me vengan con discursos a medias tintas, a hablar de que una profesión está jodida "absolutamente" porque solo les da la gana en juzgar desde los que son corruptos.

He dicho.