Dos meses y 12 días después Manuel Zelaya sigue fuera de la presidencia de Honduras. Viendo el escenario todo parece indicar que el gobierno de facto, dirigido por Roberto Micheletti se mantendrá contra el viento de la OEA y las olas de los demás mandatarios del continente frente al poder en el país centroamericano.En este blog, por varias semanas, algunas personas votaron sobre sí creían posible la vuelta de Zelaya al poder, destituido por un golpe militar el pasado 28 de junio. La mayoría -9 de 15- apuntó como un hecho irreversible la restitución de mandatario hondureño al a presidencia de su país. Seis votaron que si será posible.
Los días pasan y parece que lo expresado por la mayoría de los votantes en esta encuesta se vislumbra como un hecho. Zelaya toca puertas sin ningún fruto. La OEA no puede hacer más nada que apelar al desgaste diplomático y arengar por las cuatro esquinas, al igual que los mandatarios de los países latinoamericanos.
A todo esto se agrega el inicio de la campaña electoral para las elecciones presidenciales convocadas para noviembre por el gobierno de Micheletti (sufragios que ya advirtió la OEA y sus miembros no serán reconocidos, pero que a Micheletti parece no afectar).
Ni acuerdos, ni amenazas, ni ataques parecen doblegar a los golpistas hondureños. El mal precedente está establecido. ¿Queda algún camino?
1 comentario:
Es una pena, por que como estas la situacion mundialmente, esas cosas no le hacen bien a ninguna nacion, pero la esperanza es lo ultimo que se pierde..
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