jueves, 9 de octubre de 2008

Día dos. Reforma y crisis



Reforma y crisis. Dos palabras que han estado en el aire en las últimas semanas. Una más local, otra más global. La local, no puedo negarlo, me tiene algo mareada. La global, no puedo evitarlo, me tiene más preocupada.

La reforma constitucional, gestada y parida por el presidente Fernández, tiene todos los visos de ser el “show business” de lo que resta del año. Después de ser depositada en el Congreso, tras la famosa consulta popular, las instituciones se gastan en celebrar foros y conversatorios sobre ella.

¿Con que fin? Difundir, propiciar reflexiones, señalar elementos que debe contener o no. ¿Resultados de esto? Bueno, creo que ninguno. Al final se aprobará lo que el Congreso, en base a lo que el presidente quiere, apruebe. Considerando que el partido de gobierno es mayoría, no creo que haya mayores sorpresas.

Un colega y yo comentamos al respecto que todo este afán reflexivo, auspiciado por el mismo gobierno, tienen un claro propósito: legitimizar su anteproyecto de reforma sin muchos peros. La Asamblea Constituyente y el referendo quedarán como un deseo engavetado (como algunos famosos proyectos legislativos).

La crisis financiera. Estados Unidos con gripe y nosotros…eh, no sé si el blindaje que una vez aseguró nuestro gobierno sean tan seguro, pero por si las moscas (y no de las ojonas que suelen molestarnos con su aleteo y sus costumbres pocos aseadas) asumamos que nos tocará. Así que a tomar precauciones (las que se pueda) y para los fervorosos creyentes de todas las religiones y practicas esotéricas no estaría nada mal la invitación a rezos, novenas y conjuros.

Lo risible: Estados Unidos tendrá que asumir recetas que ha criticado hasta la saciedad para salvar su “libre mercado”. Lo curioso: a pesar de que muchos dicen que es una crisis peor que la Gran Depresión de 1929, aún no he visto al primer empresario norteamericano lanzarse al vacío desde un edificio. No se asusten ni me confundan con mala fe, no quiero que nadie haga eso. Pero…creo que esta viñeta lo explicará mejor que yo.

Por cierto, ando en algunas “reformas” yo también. No tan presuntuosas como las del gobierno, pero veremos que tal me va. De crisis…jejeje…esas siempre se encuentran en el efímero círculo de nuestros días. Molestosas, si, pero humanamente necesarias.

2 comentarios:

Miguel Rojas dijo...

NO sabía que tenías otro blog: Que apero esta el diseño, vamos a navegar en tu otro blog, me encanta, espero este todo bien por tus mundos.....

Baakanit dijo...

No sé cuál es el plan de Leonel, la moneda de nosotros ha estado aguantado artificialmente por mucho tiempo, mientras que hasta en Europa el Euro se ha devaluado, hay algo raro ahí.

La crisis creo que ya se está sintiendo allá aunque el presidente no lo quiera admitir.

Saludos